OFICIO CON BENEFICIO

Ahora toda la atención está puesta en la inmigración. Algunos países se niegan a acoger inmigrantes hasta que la UE se compromete en soltar la pasta… entonces, si acogen, ¿seguro que el dinero que se pilla es en su totalidad para dar de comer a esas personas? Esa es mi primera duda, conociendo lo que hoy conozco, en cuanto al modo de funcionamiento y la manera de meter la mano que tienen ciertos individuos que ocupan cargos públicos aforados.

Por otro lado, y ya reflexioné sobre esto en escritos anteriores referidos a este tema, el mundo no debería tener fronteras y que cada cual se fuera a vivir o viajar por dónde quisiera, pero ¿qué hacemos para mejorar la vida de esas personas que llegan a nuestro país, tienen algún futuro, si los de aquí, muchos desempleados y muchos jóvenes, no lo tienen?, ¿qué quiero decir con ello?, pues que se debe tener un proyecto de país industrializado que ponga fin al desempleo estructural y convenido para que las condiciones de trabajo sean malas o precarias, al tiempo que se aproveche toda esa mano de obra extra que nos llegue. Todos trabajamos, todos producimos, todos ganamos nuestros jornales y todos contribuimos con los gastos de los servicios públicos, pero el gran problema es que hay que hacer políticas a largo plazo y los que estuvieron, los que están y los que llegarán nunca hablan de esto sino de parchear a corto o medio plazo.

No hay futuro porque los que tendrían que crearlo o asegurarlo, solo están en la labor de tirarse platos a la cabeza delante de las cámaras, hacer circo o espectáculo de cara al público y compitiendo por conseguir votos para imponer su “dictadura” (la imposición de sus ideas, no las ideas o decisiones que tomemos la ciudadanía). Ese es el cortoplacismo de todos los que se mal dedican al oficio político, que son casi todos, puesto que la disciplina de partido anula al individuo. Echo de menos debates en el congreso, en lenguaje entendible, sencillo y llenos de propuestas con sus correspondientes acciones, que habría que emprender, para llegar a hacerlas realidad. No hay voluntad política por solucionar los problemas que tenemos como país. Los anteriores gobernaron sacando pecho y explotando que estaban salvando al país, mientras hacían eso nos estaban endeudando hasta los ojos, precarizando el trabajo, bajando los salarios de todos los trabajadores, poniendo en peligro las pensiones de los mayores, vaciando las arcas con los regalos de dinero que hicieron… ¿esto es ir bien, eso es sanear la economía del país, a quién pretenden engañar? Nos tomaron por idiotas, siempre actúan así, se creen que no sabemos qué hacen y cómo lo hacen… ¡no tienen vergüenza!

El petróleo se agota como cualquier recurso natural del que se lleva tantos años aprovechándose la humanidad, ha llegado el momento de reaccionar para hacer uso de otras energías, ¿cuándo piensan las autoridades españolas que será el momento de proyectarse en ese tema que tanto nos endeuda con el exterior?, ¿qué intereses hay en seguir consumiendo petróleo y contaminando? Lo cito como un claro ejemplo de que nuestras autoridades no están por conseguir un futuro mejor, pasan del tema, van a lo suyo, a los intereses de partido, a mantenerse cuantos más años mejor en la foto y comiendo del dinero público. La rivalidad no es buena, lo que hace falta para progresar es la cooperación, la solidaridad y la voluntad de cumplir con la obligación que tienen: trabajar solo por el bien de todos. En lugar de esto qué es lo primero que hacen cuando llegan, pedir compatibilidad para desarrollar trabajos privados, que es lo que les importa: trincar de un lado y de otro.