Volviendo a la noticia que
comenté hace unos días, sobre la posibilidad de vencer a la muerte dentro de
unos treinta años, o de curar todas las enfermedades en unos veinte años; me
queda cierto resquemor al respecto, pues se me hace incomprensible que varias
empresas estén invirtiendo sumas astronómicas en el asunto y, me temo, este
avance científico, si se llega a conseguir, será un acicate para que los
poderosos se distancien, definitivamente, del resto de los mortales, nunca
mejor dicho; pues ellos, según parece, podrán elegir no morir nunca. Será una
cuestión de dinero enfermar o no, morir o no, y como ya sabemos, a las clases
bajas o menos pudientes nos dejarán morir como ratas; consiguiendo el propósito
de poder por el que vienen pugnando los de arriba de la pirámide social.
Este asunto se me representa como
la conquista de Marte, que quieren comenzar en aproximadamente diez años. Yo me
pregunto: si cuando hablan de una salida a la estratosfera para ver la Tierra
desde afuera, cuesta unos millones, por cuánto saldrá el viaje con los bártulos
pertinentes para instalarse en Marte. Está claro que hay una minoría planificando
su salvación a toda costa. Si en la Tierra se crea un conflicto nuclear
tremendo que vaya a poner fin a la existencia de la vida en este Planeta, ellos
piensan que hay que tener lista la huida hacia Marte. Si el final de la
existencia es la muerte, casi siempre por alguna enfermedad, pues hay que
vencer a la enfermedad y a la muerte; pero es que se ve a las claras que están
articulando el modo de vida que a ellos les conviene y, que además, serán los
únicos que se lo podrán costear. Ellos lo que no han debido pensar es que con
ese método, solo van a quedar los adinerados, a quién van a mandar, ¿sobre
quiénes ejercerán su poder?, al menos que rivalicen según sea la cifra en las
cuentas bancarias.
O sea, que aunque nos hayan hecho
participes del que podría el avance más espectacular de la humanidad, será para
que se eternicen los multimillonarios. Ejemplo: hoy en día usted puede optar a
que le congelen, a la criogenización, pero no todos podemos costear tal
servicio; creo que su coste es de unos ciento veinticinco mil euros. No a todo
el mundo, en este Planeta, le sobra una cantidad similar… tengo algo suelto en
mi bolsillo… pero no llego, así que me jodo, no me pueden criogenizar. Lo mismo
va a suceder con la burla a la muerte, algunos la podrán pagar, el resto al
hoyo y ¡felices, eternos sueños! Yo nunca había pensado en perpetuarme, pues
como saben vivir tiene lo suyo, sobretodo, cuando se enfrentan situaciones que
cuesta digerir, que no tienen explicación, que duelen y nos hacen sufrir… ya lo
sé, el único culpable he sido yo, siempre que mi actitud no fue la adecuada,
porque resistirse a lo que tiene que ocurrir, o querer retener lo que se ha de
ir, hace sufrir. Es siempre una actitud mental de comprensión y, por ende, de
aceptación con lo que es irremediable, con lo que la vida va poniendo por
delante a cada uno de nosotros. Hace falta una mayor ración de tolerancia y
paciencia para fluir con la vida, así como no creerse más que nadie sino uno
más. Para finalizar, esa gente que promueve el invento que nos ha hecho
escribir sobre él, les hace falta una vuelta de tuerca, un cambio de
mentalidad, una conexión con su ser, sentir la energía de la vida; si no, esto
no es posible, el uso del invento acrecentara las diferencias y los conflictos,
¿de qué serán capaces algunos con tal de no morir?
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