Nuestro
presidente, como ya he comentado anteriormente en otros escritos, se reunió en
las semanas pasadas con agentes sociales y asociaciones civiles para conocer
qué se debe ofrecer a la sociedad, eso supongo yo, sería lo que trataron. Sr.
Sánchez, ahora que estamos en verano y el sol azota terriblemente ¿algunos de
esos con los que se ha reunido le ha manifestado, que cantidad de personas se
juegan la vida cada día, forzosamente, porque las condiciones de sus puestos de
trabajo atentan contra la vida? Porque trabajar a pleno sol durante ocho horas
por la necesidad de llevar un sueldo de desgraciado a casa, es una necesidad
para todos los que tenemos que vivir y pagar nuestras facturas. Sr. Sánchez, su
partido lleva en las siglas lo de obrero, que supongo que en los 140 años de
existencia, muchos de los que se lo creyeron les habrán votado, pero si usted
no toma medidas, ni los agentes con los que usted dice haberse reunido, tampoco
lo hacen, es que la vida de esas personas no está en vuestra conciencia, pero
eso sí, los accidentes que sucedan, los golpes de calor que se produzcan tienen
responsables… todos esos, entre ellos usted Sr. Sánchez y los parásitos que le
rodean, que sois incapaces de legislar algo que es de sentido común, a la gente
no se les puede freír por dentro porque ustedes no legislan por la seguridad y
salud de los empleados de obras, instalaciones al aire libre, pavimentado,
solado, alquitranado, que se las ven día tras día con el fuego abrasador del
sol que les acerca a un probable final trágico.
¿Cómo
es posible que en reglamentos de seguridad y prevención de riesgos laborales se
trate de las condiciones óptimas del puesto de trabajo en el interior de edificios,
y no se mencione ni una palabra para regular el trabajo exterior en función de
las condiciones de emergencia climatológica por calor en muchas zonas de
España, en especial, en Andalucía? No obstante, este año como nos muestra la
información meteorológica de los telediarios, las olas de calor se extienden
por media España. Sr. Sánchez y su gobierno en funciones, más todo ese
esplendido programa que usted trata de consensuar con esos agentes que usted
conocerá, además de subvencionar, ¿les importamos algo aquellas personas que
todos los días salimos de casa con la incertidumbre de si volveremos al final
de la jornada? Esto puede parecerle exagerado, pero le invito a venirse al
tajo, no a darse la vuelta de rigor, no a hacer una visita oficial con foto
incluida, venga con el pantalón de trabajo, el polo de manga larga, el chaleco
reflectante, el casco, las botas, los guantes y las gafas de seguridad. Venga a
trabajar, solo será desde las siete de la mañana hasta las tres de la tarde, es
la única forma que ustedes comprendan que eso no es trabajar, sino jugarse la
vida. Llegas a tu casa y te duchas lo primero, después casi no tienes ganas de
almorzar, el calor que has pasado te impide comer, te quita gran parte del
apetito y si te acuestas un poco siente que tu cuerpo ha adquirido un poco más
de temperatura, pero parece que son los órganos internos los estuvieran un poco
abrasados.
Cuanto
digo es igual de válido para todos sus compañeros del gobierno en funciones,
para los que pretenden seguir gobernando, para los que apoyan y para los que
solo hablan de hacer oposición, ¿algunos de ustedes van a hacer algo por la
gente que penosamente sufre esto cada día para ganar 1000 euros cochinos? Sí,
cochinos, y no vale argumentar que en estos tiempos es un buen sueldo, ¿usted
se jugaría la vida por ese salario?, ya sabe que las empresas tienen la
costumbre de hablar en términos de salario anual bruto, pero eso sí, con las
pagas extraordinarias incluidas, o sea, que el carácter de extraordinarias lo
perdieron hace años cuando las incluyeron en el salario para maquillarlo y nos
hicieron perder las susodichas pagas de julio y diciembre.
Cómo
nos van a representar los políticos de los sillones azules, con salarios
abultados de varios miles de euros, a los que se suman dietas y privilegios
auto asignados, sentados tranquilamente con aire acondicionado, pero sin hablar
ni una palabra de nosotros, sobre los que nos jugamos la vida en verano en cada
jornada de trabajo. Los horarios hay que tocarlos, se ha de trabajar en las
horas frescas del día, si hace falta acortando la jornada de trabajo, ¿saben lo
que dicen los responsables de la prevención… ¡beban, beban aunque no tengan
sed!, y le aseguro que lo hacemos, pero llega el momento que la exposición al
sol y al calor es tal, que aunque se hagan pequeñas pausas, al volver al tajo
estás hirviendo interiormente… ¡es inhumano!, se soporta como mejor puede cada
uno, pero esto no es prevención de riesgo laborales, esto no es trabajar
seguro, y lamento el abandono de los legisladores y de las autoridades que
tendrían que tomar parte en el asunto para hacer que trabajar no sea una
exposición continua de la vida de los trabajadores.
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