No hay prisas, vamos los primeros
en intención de voto, ya con eso están arreglados todos los problemas de los
españoles. ¡Qué fácil se hace manipular a la gente en este país de troleros
políticos profesionales! Hoy salen los resultados de las encuestas del CIS para
unas hipotéticas elecciones y todo quisque pierde la cabeza, incluidos los
medios de comunicación, la manipulación cerebral se hace palpable y la noticia
ficticia ocupa toda la programación, tanto radiofónica como televisiva… ¡qué
mal estamos! Por todo el día se olvidan los problemas que asola a la ciudadanía
y al país: corrupción, falta de proyecto político, pactos con forma de
zanahorias, impunidad para los chorizos de guante blanco y cargos públicos,
precariedad laboral, abuso laboral, explotación laboral, parálisis de la
inspección de trabajo, tetraplejia judicial cuando se trata de pedir
responsabilidades y repartir condenas ejemplares a políticos que se han llevado
el dinero a espuertas, etc.
Los políticos entrevistados a
raíz de los datos ofrecidos por el CIS para, repito, manipular a la gente de
este país, solo saben hablar de competición por los votos, de adversarios
políticos, de rivalidad y se envuelven en una suerte de ensoñación en las que
se llegan a ver como pastores del rebaño nacional, algo que les hace mucha
ilusión para convertir este charco de corrupción en una idea propia de lo que
debería ser España a sus ojos. Lo malo es que los que han protestado en un
sentido, cuando han gobernado no hicieron nada por cambiar el rumbo del
descenso hacia los infiernos económicos y de pérdida de derechos, que lleva
España desde hace diez años… la mierda la remueven y se la reparten alícuotamente.
Dar soluciones es un tema, parece ser, bastante complejo para el “nivelazo” de
algunos políticos, claro, con tanto master reunido Geyper, no se alcanza el
conocimiento y el sentir humanitario que exige el cambio. Además, ninguno osa
contravenir los mandatos de los que les mueven los hilos, ni siquiera se
atreven a denunciar públicamente que les tienen agarrados por sendas partes
nobles. Si los políticos se divorciaran de esos traidores que se encuentran
detrás del decorado, jugando la partida de sus vidas, pueden estar seguros que
toda la ciudadanía estaríamos de su lado, pero si juegan en el equipo contrario…
¡que les den!
Vaya la que han liado con las
pensiones, primero oposición firme contra cualquier subida que no fuera el
0,25% (una auténtica porquería monetaria). Luego, se pusieron nerviosos ante la
avalancha de mayores que ocupaban cada semana las calles y M. Rajoy, el que se
lleva hasta el manso sin importarle cómo pueden vivir muchos y muchas
pensionistas con limosnas mensuales, accedió a subir las pensiones más bajas y
las de viudedad. Seguían en el intento de hacernos ver que no se subían las
pensiones porque no había dinero para ello, pero… ¡oh!, el milagro se realizó y
apareció dinero de donde no había más y, ante las presiones de las
manifestaciones por una pensión digna en toda España, acepta de nuevo tirar de
la chequera y dice se van a subir todas las pensiones conforme al ridículo y
engañoso IPC. No obstante, esto no se ha terminado, los jubilatas no piensan
desistir hasta, como dicen, las pensiones más bajas sean de 1080€, y yo les
aplaudo, los políticos viven como dios y el resto a sufrir estrecheces. Esto se
ha de acabar, hay que revertir la situación, son los políticos los que han de
estar a nuestras órdenes y no al contrario, somos nosotros y nosotras los que
pagamos la fiesta. El poder ha de ser de la ciudadanía y no de los políticos,
ellos son nuestros empleados… ¡hay que dejárselo bien clarito!
No hay comentarios:
Publicar un comentario