LA TELEVISIÓN DEL DINERO

¡Qué no te sienten frente a la tele!, no dejes que pasen las horas frente a la caja tonta, ve televisión de un modo selectivo, eligiendo lo que tú quieras ver, selecciona lo que te interese de entre toda la programación. La televisión es muy absorbente, requiere de tu vista y de tu oído, pero es necesario que te sientas enfrente y no te muevas; es egoísta, te quiere todo o toda para ella. Cuando se suceden los días y te pasas horas viendo tele, te han metido cantidad de datos que no te interesan en la cabeza, te han bombardeado con la publicidad, te han querido vender veinte o treinta modelos de coches, no sé cuántos móviles, otra tanto de seguros, varios créditos rápidos, etc.

Como todo en esta existencia mercantil, va de dinero, la televisión también, no en vano pusieron de moda aquella frase: en la televisión el tiempo es oro; efectivamente, lo cobran a precio de ese valioso metal. Lamentablemente, una vez más todo va de dinero, el movimiento del mismo por delante de lo que sea mejor para las personas, todo se acomoda a lo que se vende con el propósito de convencer a los clientes potenciales, que para los que venden somos todos los demás, por eso nos bombardean con su publicidad y la televisión accede sin poner condiciones. Los programas se interrumpen una y otra vez porque el contenido es solo la excusa para tener por medio unas buenas baterías de anuncios… que son los que meten dinero en la cadena.

Yo siempre he dicho que esto sucede por la bajada de pantalones de las empresas de medios de comunicación que no nos tienen en consideración, a ellas les importa mucho más los que le dan dinero a ganar en directo; nosotros lo hacemos indirectamente, nosotros no vamos con los billetes a meterlos en sus cuentas corrientes, las empresas que se anuncian, sí lo hacen. Todas las cadenas se podían poner de acuerdo y no cortar ninguna emisión para que otros traten de vender sus productos. ¡Las ventas entre programas!, si todas las empresas de medios lo acordaran, a los que quisieran usar ese medio no tendrían más remedio que contratar para salir entre espacios de la parrilla. Temen que tendrían menos publicidad contratada para emitir, siempre es un riesgo, pero la gente debe estar por delante de los negocios y, muy a mi pesar, no es así, la gente va por detrás, solo hay que ver la cantidad de televisión basura que les meten a las personas en la cabeza… emisiones que no aportan nada, con la sola excusa de que entretienen.

Echo de menos una televisión educativa, que ayude a la formación de las personas, que divulgue temas científicos de todas las áreas de la ciencia y de las letras. Echo de menos una televisión positiva que deje al lado el morbo de las peores catástrofes, que se centre en lo bueno que sucede cada día; la otra cara de la moneda se puede dar solo de pasada como mera información sin importancia. Todo debe tener una función para crear una sociedad mejor, por tanto, todo debe ser constructivo, no destructivo y la televisión como medio de información masiva que entra en todos los hogares, debería cuidar mucho más los contenidos que vierten en las casas de los demás.