Sí, Rubiales, por un beso te ha de costar el puesto al frente de la Federación Española de Fútbol, porque no eres nadie para dar rienda suelta a tus deseos y, mucho menos, para materializarlos delante de millones de personas. Las cosas no se hacen así si no media un acuerdo mutuo y un consentimiento de la otra parte, eso no se hace y te deben mandar a casa. Dudo que se lleve hasta las últimas consecuencias puesto que esto es España, y en esta tierra se suceden continuamente actos delictivos de todo tipo sin que sus responsables paguen por ello, devuelvan lo que roban, pasen por prisión y, aún más difícil, devuelvan el dinero distraído o malversado. Esto es España, una tierra donde cuesta horrores dimitir, donde todas las fechorías son casos aislados y donde los ladrones siguen yendo a la oficina aunque no hagan ni la "O" con un canuto, parece que estén pegados a los sillones del poder. Con la ayuda de una justicia oxidada de no ejercer, maniatada y secuestrada por los políticos, los casos de corrupción y mafia frecuentes son echados fuera de los procesos judiciales, vamos que sus expedientes se cierran antes de comenzar los juicios, las pruebas se pierden por el camino o a martillazos, los delitos prescriben, la droga se la fuman o la esnifan, las tarjetas las funden, los dineros se desvían a paraísos fiscales y se deja de tributar mediante una trama de empresas en Panamá. De todo ha habido, pero casi nadie da con sus huesos en la cárcel, si entran salen con cualquier excusa, muchos se ponen muy malitos, son enfermos terminales dentro y flores con aspecto primaveral cuando se les deja ir a casa para morir..., ninguno se muere, sino que siguen con sus trapicheos.
Ahora, Rubiales, te toca a ti por un beso robado a una chica que juega al fútbol y de la que has abusado en cierta forma, dale la mano como un señor y felicítala, ¿acaso besaste a las veinte jugadoras, acaso el impulso te hace la misma mala pasada cuando gana la selección española de chicos? Y ya te has librado de cantidad de asuntos turbios con el mundial de Catar, con las copas del Rey llevadas a Arabia Saudí, ¿Crees que nos tragamos así como así que algo tan de aquí te lo lleves tan lejos, a territorio ajeno a los españoles (menos a uno que se encuentra exiliado por sus desmadres), cuánta manteca se ha movido por lo bajini? España es una cloaca y huele mal desde hace años, no va a ser menos la Federación de Fútbol, un ente más inmerso en la cloaca.
Frente a este abuso de poder, a esa chulería machista, está algo que cantaba Jarabe de Palo, Por un beso de la flaca, ¡pedazo de canción!, La Flaca, arte que salió de la voz de Pau Donés y de los instrumentos de su banda, pero ahí queda el asunto, en el deseo reprimido: Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera... Pau sí que tuvo que marcharse y dejar este mundo, desgraciadamente a causa de una grave enfermedad, un tío cojonudo, así que por qué no te vas a ir tú a tu casa, que ya tendrás los bolsillos bien llenos, lo que te resultará más difícil es desprenderte de tanta arrogancia y resignarte a ser un despedido más.
Seguiremos...
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