El PSOE, el nuevo PSOE, sigue sin
reaccionar. Dice ser de izquierda, trata de posicionarse más a la izquierda
haciendo un guiño a sus votantes, pero lo cierto es que a la hora de votar
asuntos importantes toma por la calle de en medio, no se moja, se abstiene,
tiene falta de personalidad o carácter para ser de izquierda. Se abstuvo en la
moción de censura a Rajoy, lo que posibilitó que Rajoy siguiera en el Gobierno
a pesar de tener el partido más corrupto de España de los últimos años. También
se abstuvo en la votación para rechazar o aceptar el CETA, ese tratado de
comercio con Canadá, que ya veremos cuando vengan las denuncias contra España de
las industrias y grupos inversores extranjeros cuando digan que por tal o cual
ley nacional se ven perjudicados en su rentabilidad. Después vendrán las
terribles consecuencias para el pueblo, que lo tiene que pagar todo, mientras
que los que nos metieron en el CETA, estarán retirados, jubilados y millonarios,
disfrutando con sus familias.
La historia del orgullo de ser de
tal o cual color tiene estas cosas, que los líderes de los partidos prefieren
su visibilidad y la de su partido antes que apostar por la gente y su
bienestar. Hoy han votado otro asunto controvertido, que por lógica debería
cerrarse de una vez por todas; me refiero al tema de las incompatibilidades de
sus señorías los Diputados y las Diputadas. Yo no estoy de acuerdo con que
trabajen y cobren de otra actividad mientras se ocupé un cargo en la política
del país. Creo que hay que estar en lo que se está, y se ha de emplear el
tiempo en estar centrado en la gestión pública, algo que es dudoso cuando se
está en varios trabajos al mismo tiempo. Sigo creyendo que el trabajo político
es tan enorme si se desea hacer bien, que no hay espacio para emplearte en
otros asuntos. Pues bien, una vez más hemos visto como los que se sabe tienen
otros ingresos y otras actividades han votado en contra de que los Diputados y
las Diputadas solo se puedan dedicar a su función de Diputados y Diputadas. Por
tanto, seguirán las compatibilidades, cada cual trabajará donde le apetezca y
cobrará de varios entes… esto es un cachondeo, de nuevo impera lo personal ante
el interés de lo público, que sería dedicación exclusiva a la función política
mientras uno haya sido elegido en las urnas por los españoles… hacen lo que les
salen de los huevos, los Diputados, y de los ovarios, las Diputadas. De nuevo
otra decepción, por ejemplo con Pablo Iglesias, ¿él pagaría a alguien por
jornada completa, pero que al mismo tiempo desempeñe otro trabajo diferente al
encomendado?, ¿no gana suficiente en la política?, ¿no puede dejar al margen y
por un tiempo sus otros trabajos para no deslucir su trabajo al frente del
partido y del Parlamento? Yo prefiero tener políticos que cuando estén en
política solo estén en política. Que sus mentes y su vocación no se vean
comprometidas con otros intereses, al menos, mientras duren sus periplos
políticos.
Por último, ¿dónde dejamos a
Rivera de C’s, un partido que parece haber despertado a la corrupción del PP y,
hasta se atreve a recriminarle?, pero ha sido un espejismo, pronto y tras
dejarse invitar a comer por Rajoy, aquello de Rajoy: “Un vaso es un vaso y, un
plato es un plato”, ha sido complementado con esto de Rivera: “A una mesa de
tres patas le falta una pata”, una gran genialidad del líder naranja, que pasa
de la crítica al PP a comer con el Padrino y a seguir votando a su lado, más
bien bajo su ala o axila, no sé si es que el desodorante que usa Rajoy le tiene
abducido.
Tres ejemplos de lo poco que
valen nuestros políticos españoles, a los que cuando se les exige en una
dirección cambian de esta cuantas veces haga falta, para defender una cosa y la
contraria, todo sucede porque pierden de vista con muchísima facilidad el objetivo
de ser político; esto se lo han de mirar detenidamente.
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