Hoy escribo desde un lugar
diferente al habitual, estoy en casa de unos amigos, les voy a acompañar a un
médico que realiza la terapia del Par Biomagnético. Como saben ya he hablado de
esta terapia en otros escritos. Mi amigo y su esposa necesitan ayuda para poder
desplazarse hasta la consulta del médico.
Los que me leen asiduamente,
habréis leído el escrito sobre el Parque Industrial PISA en Mairena del
Aljarafe. Un espacio abarrotado de automóviles, con una infraestructura para
los peatones bastante deficiente, sobre todo, en el lugar de entrada, donde se
encuentra el edificio Astigi, que es donde se encuentra la consulta o clínica
del Dr. Salvador Gutierrez.
No es una bendición acudir a este
lugar, pero cuando la necesidad empuja, se va al fin del mundo si hace falta.
Les hablé a mis amigos de esta terapia y ellos han creído oportuno pedir cita y
el día ha llegado. En breve, a las 10 h saldremos para allá, con el deseo y la
esperanza de que las energías se pongan de nuestro lado, o mejor dicho, del
lado de mi amigo, que es quién más necesita equilibrio y ayuda. Es mi deseo que
pueda restablecerse cuanto antes y salir del agujero en el que se ha metido.
Parece increíble, ustedes no saben las conversaciones que hemos mantenido, mi
amigo y yo. Ambos compartimos un tema en particular: el camino interior… la
auto realización, y les puedo decir que nos hemos llevado horas paseando y
dialogando acerca de esta forma de enfocar la vida. Mi amigo siempre ha tenido
una comprensión de todo cuanto leía, algo fuera de lo normal, al menos, a mí me
lo parecía… estoy seguro de que era así. Hace algún tiempo le enganchó un
trastorno de ansiedad, tensión interior e incoherencia que nos ha dejado
descolocado a su familia, en primer lugar y a los amigos en segundo lugar. ¡No
es posible!, lo que le está sucediendo no es posible, no nos entra en la
cabeza. Es por ello, que vamos a probar con la terapia de los imanes, a ver si
todo se va a su sitio y se estabiliza. Cierto es, que mi amigo no es el de
antes, aunque tampoco es el de hace unos meses cuando sufrió la mayor crisis,
aquella a la que me referí antes que nos descolocó a todos.
Tenemos puesta la esperanza en
esto que vamos a hacer, y la energía de ambos, médico y paciente, así como la
del Universo se han de aliar esta mañana para que el equilibrio se produzca.
Estamos en tiempos de creación, según anuncian los que hacen una lectura
diferente de la situación temporal. Dicen que desde el final del 2012 la
energía que nos llega a la Tierra propicia el cambio, la realización de los
seres conscientes y coherentes, al mismo que tiempo que va a motivar estados de
desequilibrios en los casos en los que las personas no estén centradas o se
dispersen en demasía.
Lo tenemos todo para alcanzar lo
que queramos y por eso nuestro pensamiento ha de ser limpio, claro y concreto,
porque si es negativo también se va a materializar de algún modo no deseable.
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