EEUU sigue jugando a la guerra y provocando cuanto puede, no tiene suficiente con meterse en casa de los vecinos del mundo e incitarles a que le sigan en el juego tan decadente e infernal, sino que está deseoso de que la ola bélica se acreciente. En esta ocasión ha sido un dron estadounidense que cayó al mar mientras realizaba una operación o maniobra, como le gusta llamarle, a la acción que solo ellos conocen. EEUU culpa a dos cazas rusos de volar cerca de su dron y de forma temeraria. Por su lado, los rusos dicen que el dron tenía pretensiones de vigilar más allá del espacio internacional y muy cerca a su frontera. Sea como sea, por qué siempre EEUU tiene que meter las narices allá donde hay tensión, haciendo maniobras militares al borde de las fronteras de los que ya están bastante cabreados. Lo hizo entre Taiwan y China, lo vuelve a hacer justo al lado de la frontera rusa.
Como ciudadano del mundo estoy de los dirigentes mundiales hasta donde ya se pueden imaginar. Estoy del negocio de las armas, de las guerras, de los odios y los rencores, hasta el mismo lugar. Estoy de los intereses velados de los países, que son aprovechados para invadirse, para destruirse y para imponer las reglas de unos sobre otros, hasta donde ya saben. Cómo es posible que para unos ciertos gobiernos no haya nada mejor en lo que dedicar sus dineros, sus recursos y su irrepetible tiempo. Esos insensatos no se dieron cuenta que están despilfarrando sus vidas y la de millones de seres inocentes a los que obligan a combatir en su nombre y por su país. Algo que han de hacer bajo la presión y el terror a ser fusilados si se oponen. Es la cara más criminal y salvaje de la gente incivilizada, la que hace que millones de inocentes tengan que morir por una causa que solo entienden o atañe a ciertos gobernantes, y que en nada beneficia ni interesa a sus pueblos.
Hay que negarse a combatir por ser técnicas primitivas, ¿vamos a quedar anclados a tiempos y formulas remotas? ¿Seguimos siendo seres involucionados, los mismos de hace siglos? Ya es hora de cuestionarnos todo esto, y hallar respuestas que nos hagan tomar conciencia de la forma en que estamos creando miedo y terror a la humanidad. El cambio solo puede llegar tras haber tomado conciencia de lo mal que lo estamos haciendo en muchos aspectos que nos afectan directamente, que afectan al Planeta y al resto de los seres vivos. El modelo actual es un auténtico fracaso liberal-capitalista, con amenazas constantes a la estabilidad económica. Un sistema que fomenta la fragmentación de la sociedad, que crea brechas salariales, pésima distribución de la riqueza, confusión de identidad, leyes absurdas, permisividad mafiosa y corrupta, ausencia de justicia real, cantidad de gente parásita alimentada y sostenida por los ciudadanos en obediencia a leyes absurdas y obsoletas.
A pesar de todo ello, los políticos siguen con su performance, con su show, con su reality, muchas veces nada ético, inmoral, ilegal en ocasiones, sin cambiar las leyes que tanto les benefician a ellos, y que tantos privilegios se conceden a sí mismos, como autores y mantenedores del código legal en vigencia. Esos señores, definitivamente hacen guiños a la población, pero desde posiciones ostentosas, soberbias y manteniendo a raya a la ciudadanía mediante sus leyes y la represión de los cuerpos de seguridad, de su seguridad (Ley Mordaza). Es por todo ello que la ciudadanía está obligada a dar la espalda a los políticos y a su sucio juego. La reacción ciudadana que ya toca es la de dejar las urnas vacías, no acudir a votar, dejen que se voten ellos mismos y sus familiares. Por favor, hagámonos un gran favor a nosotros mismos, demostrémosle que no nos interesan, que no seguimos jugando en su terreno embarrado, sucio, opaco, mafioso y corrupto. No olvides ignorarles, hay que despertarles de su ensoñación. Deja de votar, que es el acto más democrático que podemos ejercer mientras no modifiquen las leyes, empezando por la electoral, que es totalmente injusta, beneficiando a los partidos más fuertes, en detrimento de las formaciones más pequeñas.
Seguiremos...
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