En primer lugar doy el pésame a su familia, y lamento la desgracia sucedida, aunque para mis adentros sigo sin explicarme cómo no reaccionó de un modo diferente. Dicen las noticias que perdió el tren de las 7,35h con destino a Córdoba, que quiso montar en un AVE con destino a Barcelona, porque creía podría apearse en su ciudad. Dicen las noticias que no tenía dinero y el móvil se había quedado sin batería, y es ahí donde comienzan mis dudas, por qué no pidió ayuda, que le dejaran realizar una llamada con algún móvil de otra persona o, pedir en algunas de las oficinas de la estación que le dejaran enchufar un momento el móvil para hacer dicha llamada o poder pagar un nuevo billete.
El chico había estado la noche anterior de fiesta con amigos y tal vez no estuviera bien del todo, porque como jugador de fútbol y estudiante de ingeniería, le presupongo una capacidad de reacción razonablemente superior a otros menos preparados físicamente y mentalmente. Algo ha fallado, solo una llamada a sus padres indicando la situación, hubiera provocado que alguien de su familia, incluso, se hubiera desplazado a recogerle en la estación... que Córdoba no está tan lejos, solo a 140 kms. Sé que hablar ahora es delicado y, a la vez, fácil en cuanto a deducir cosas que pudieron ocurrir, pero es que desde que se van oyendo las primeras noticias, todos nos hacemos las misma preguntas: por qué no pide ayuda, no pide que le dejen realizar una llamada, o que le permitan enchufar el móvil con un cargador de alguien que estuviera en la estación.
Acongojan unos hechos como los acontecidos, la pérdida de una persona tan joven causa dolor a los ajenos, no quiero ni imaginarme el infierno para los padres y familiares cercanos. Lo reitero, lo siento mucho, sobre todo por la rabia, en el fondo sigo creyendo que no era complicado haberlo evitado, el chico no debiera estar del todo bien, si no hubiera actuado de un modo distinto, hubiera resuelto, al menos que el terror y el nerviosismo se hubieran apoderado de él por haber perdido el tren, haberse quedado sin dinero y sin batería en el móvil. De nuevo me surge una pregunta, qué hacía todavía sobre las diez de la mañana alrededor de las vías del tren, qué se le pasó por su cabeza, por qué subió al techo del tren, según dicen fue captado por cámaras de una gasolinera cercana. Qué pretendía hacer, dicen que era un tren averiado, otros han dicho que lo habían dejado arrancado a pesar de llevar allí un mes, algo incomprensible. ¿Escuchó que estaba en marcha y pensó que igual saldría en breve? A mí me cuesta creer la versión de que el tren abandonado en un extremo de las vías hasta que llegara el momento de llevarlo a taller, estuviera arrancado todo ese tiempo, aunque ya sabemos que la irresponsabilidad de algunos y la idiotez puede llegar a ser superlativa.
Igual nunca nos enteraremos de la versión real de los hechos, lo que sabemos es que parece se electrocutó al ponerse en contacto con la catenaria que alimenta al tren... ¡una gran desgracia! D.E.P.
Seguiremos...
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