miércoles, 6 de febrero de 2013

NUEVA POLÍTICA


Se me ocurre una nueva forma de hacer política, ya que la actual no está dando resultados satisfactorios para la población, resulta excesivamente costosa en relación a los beneficios que los ciudadanos percibimos.
Creo se haría mejor política si se tomaran las decisiones en un parlamento plural, y cuando digo plural me refiero a que estén representadas todas las fuerzas políticas constituidas legalmente, cada una de estas representadas por una persona, que aporte sus ideas y opiniones.
De esta manera, no nos veremos más, gobernados por un partido político en mayoría, que es lo que tanto ansían los políticos actuales, y que equivale a una dictadura de las ideas de ese partido. No vale decir que es el más votado y por eso nos ha de someter a todos los españoles a sus ideas o caprichos, pues solo tenemos que echar un vistazo a la situación actual, donde un partido elegido según un programa presentado en campaña electoral, defrauda a todos sus votantes para hacer todo aquello a lo que le obliga Europa.
Por supuesto que puede existir una situación difícil que obligue a lo referido anteriormente, pero se le ha escapado la oportunidad a este gobierno de actuar con coherencia, humildad y respeto a los ciudadanos, pues desde el mismo momento en que comprueban que ellos no pueden gobernar debido a las imposiciones externas, deberían haber convocado un referéndum, previas explicaciones, para ser ratificado, o bien tomar la determinación de dimitir por no poder aplicar su programa, que es para el que fue elegido.
Lo expresado tiene un nombre: “Vergüenza”, dignidad, si se quiere, y por supuesto coherencia y tener conciencia hacia los ciudadanos, pero ¿qué ocurre?, pues que los políticos actuales se agarran a un clavo ardiendo con tal de no dejar el trono, esa posición por la que han luchado tantos años, por la que han cometido cientos de triquiñuelas de todo tipo para llegar, y de la que no están dispuestos a renunciar, ya que este verbo no existe en su diccionario particular.
El resultado de todo ello, es que el país no está gobernado buscando el bienestar de los ciudadanos, sino el de ellos, que colaboran muy estrechamente con los llamados mercados, grandes fortunas, banqueros, etc. Se arriman a ellos que son los que les marcan directrices, les conceden privilegios como condonarles los créditos, etc., obviando que eso les obliga en otras direcciones, privándoles de gobernar libremente, y tomando decisiones que tienen que satisfacer y beneficiar a sus captores, en detrimento del bienestar y del progreso de los ciudadanos, de las diversas regiones y del país en general.
Por todo ello, vuelvo al principio del escrito, y considero que sería mucho más justo y más cercano a lo que es hacer política democrática, que todos los partidos políticos legalmente constituidos tuvieran un solo representante en el parlamento, para consensuar entre todos cada una de las decisiones que sean necesarias para gobernar nuestro país.
Espero comprendan el sentido del escrito, como ven no es la formulación de una queja, sino la exposición de una nueva propuesta política.

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