El artículo que acabo de leer en el diario digital 20 Minutos me refresca la mente y me trae al presente, que se puede vivir de muchas formas con preparación, especialización, buenos contactos y un poco de suerte. El artículo habla de una joven de 33 años que vive junto a su marido en un yate de lujo viajando alrededor del mundo, trabajando un par de días a la semana y ganando unos 779.000 € anuales. La chica, actualmente, tiene un blog dedicado a las finanzas, aunque cuando terminó sus estudios universitarios consiguió un puesto de analista financiera con unos ingresos anuales de 40.000 dólares. Trabajó para poder pagar sus préstamos que le facilitaron poder estudiar en la Universidad. Según indica, el blog fue algo que hizo para poder completar sus ingresos y llegar a fin de mes mientras trabajaba como analista financiera y abonaba los plazos de sus préstamos.
Lo del blog fue una necesidad al principio y un hobby siempre, pero al cabo de unos meses reportaba cantidades significativas. Brindaba asesoramiento sobre cómo invertir, cómo ahorrar, qué productos financieros adquirir y también comenzó a dar cursos e incluir publicidad en su blog. El resultado es que consiguió pagar sus deudas, ganar dinero, cada vez más, dejó su empleo y se independizó como ya se dijo anteriormente. Todo esto me hace ver que no solo existe el modelo único que casi todos seguimos: estudiar, buscar un empleo o hacer unas oposiciones y ser un número de la corporación X. Hay mucho más, casi todo lo que estés dispuesto a arriesgar y por todo lo que estés dispuesto a luchar por que te guste tanto, te apasione, que creo es la palabra justa para expresar el detonante necesario para dedicar tu valioso e irrepetible tiempo. Eso sí, hay que ser bueno y distinto en aquello que se ofrece, pero el motor, nunca debemos olvidarlo es la pasión por aquello a lo que estamos dispuesto a dedicar nuestra vida. Hay que estudiar más, hay que prepararse más, hay que ser el mejor si es posible. Todos podemos brillar con luz propia, pues todos somos genuinos, diferentes y tenemos habilidades distintas. Hay que apostar por lo que te ilusiona y dominas. Hay que trabajar con total honestidad, dando lo mejor, y el éxito llegará tarde o temprano. Los mercados fluctúan y no todos los momentos rinden de la misma manera, pero no hay motivo alguno por el que no puedas encajar, encontrar tu sitio y demostrar que eres bueno o buena.
De cualquier manera, te deseo mucha suerte y éxito en lo que emprendas, todo está ahí, es un abanico de oportunidades si sabes lo que quieres y lo presentas del modo adecuado. Quizás sea muy importante que te preguntes: ¿A qué quiero dedicar casi cada minuto de mi vida, qué es lo que mejor sé hacer, me gusta lo que hago, haciendo qué es como me siento más feliz? Una vez obtengas respuesta... ¡Adelante!
Seguiremos...
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