Les hablo desde Sevilla, por fin llueve y me parece una bendición tras las olas de calor extremo que hemos padecido durante todo el verano. Ayer noche olía todo el ambiente a tierra mojada, pero en la zona donde vivo, a las afueras de la ciudad aún no caía ni una gota, acabo de levantarme, sobre las siete de la mañana y bendita la lluvia que cae.
Por qué he titulado: A qué jugamos, pues paso enseguida a explicarme. El día uno de septiembre rociaron los cielos, los aviones estaban como locos recorriendo el éter y dejando estelas de "humo", para mí pulverizaciones de lo que sea, algunos hablan de yoduro de plata, para incidir en la climatología. Eso sucedía el pasado día 1 de septiembre, hace dos días y aquí están las lluvias, entonces hay que preguntarse si aquí llueve cuando algunos quieren, y si es así, vuelvo a reiterar: A qué jugamos. ¿Consentimos que los pantanos y otros lugares de almacenamiento de agua lleguen a extremos críticos, sin hacer nada, y cuando a algunos les parece se da la orden de fumigar los cielos y se provoca la lluvia? A qué jugamos, a qué están jugando algunos, qué insensatez es ésta. ¿Por qué siempre ponen en juego la alarma social, en este caso la escasez del agua?
Ya hace tiempo escribí sobre estas pulverizaciones de los cielos, y para documentarme descubrí que en el Estado español era una práctica que se venía realizando para ayuda a los cultivos desde los años cincuenta. Era algo pedido por los agricultores y permitido por los Gobiernos de la época. Se pulverizan diferentes productos para tratar de provocar lluvias o evitar la formación de granizos que pudieran perjudicar los cultivos. Dense cuenta, llevan sesenta o setenta años tratando de manipular el clima y, seguramente, no seremos el único país del mundo, así que de nuevo la ambición y egoísmo de nuestra especie se carga el ciclo natural climático, pero como es normal en estos casos la irresponsabilidad es manifiesta y la culpa es nuestra, de todos, que hemos lanzado demasiados gases de efecto invernadero, ¿Cuándo los falsos y estafadores gobernantes que hemos tenido y tenemos van a dejar de mentirnos y van a asumir la responsabilidad de sus actos?
¡Bienvenida sea la lluvia!, pero que lo digan a las claras, que las han provocado como llevan haciendo cada vez que pueden, porque las estelas de "humo" que forman una red en los cielos se suceden días antes de grandes nublados y probables lluvias... ¡Qué casualidad!
Seguiremos...
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