Hoy vamos a acercarnos al
silencio, a la necesidad de incorporar un poco de silencio a nuestras vidas,
quiero destacar la importancia del silencio.
Deberíamos de modificar, aunque
solo fuera levemente, nuestros hábitos, para conseguir estar un poco más de
tiempo con nosotros, a solas. Poner menos la televisión o la radio para
centrarnos más en nosotros, y llegar a sentirnos. Convencernos de que podemos
cambiar, y que este cambio nos reportará bienestar, salud física y mental.
El silencio es sinónimo de ralentizar
el ritmo de vida actual, llegando casi a parar,…. a veces se para y suceden
cosas maravillosas, experiencias mágicas y hermosas. No obstante, no te hablo
de hacernos monjes o monjas, pero si de la necesidad de procurarnos un espacio
para nosotros, donde el silencio exterior e interior sean uno, nada, y todo a
la vez.
A muchos esto les ha de sonar a
chino, si es así, trata de captar no con la cabeza, a ver si puedes desde el
corazón, ¡ojalá resuene algo, de lo que hablo, en ti!
Debemos sentirnos como seres
humanos, esta es nuestra naturaleza, y no solo basta con parecerlo, sino que
además hay que serlo; es en este momento cuando entran en acción la coherencia,
el respeto, el amor, etc., porque nuestros actos deben respaldar a los seres
humanos que tenemos que ser, pero escrito con letras mayúsculas.
Un buen comienzo, pudiera ser:
menos hablar y más contemplar para sentirnos en el tiempo, para ser el tiempo
mismo, sin importarnos más que el momento que estemos viviendo; por ejemplo
este momento en el que escribo en silencio, que es el mismo en el que tu estás
leyendo, puesto que solo soy la energía que dejan estas letras en el papel, y
si tu estás en silencio, solo existe esa energía que estamos compartiendo, ¿lo
entiendes?
Escribo para ti, y hasta puedo
sentirte mientras tu lees, aunque el instante de tu lectura no coincida con el
de mi escritura, pero como escribo para ti, cuando yo escribo y cuando tu lees,
para mi es el mismo instante, y la escritura es el nexo.
Y ya de vuelta, reitero que no
nos perdamos por la boca ni por el pensamiento, paremos y sintámonos, busquemos
siempre en nuestro interior, donde está todo lo que podemos anhelar de nuestro
verdadero crecimiento, mantengamos el deseo de llegar a saber quienes somos,
queramos llegar a ser y dar un paso en nuestra evolución personal.
El silencio es la nada que todo
lo contiene, no es nada despreciable este vacio tan lleno, y espero que algo te
llegue, que puedas reconocer algo de lo que te hablo y que resuene en ti.
Cuando no se conoce algo, es difícil
echarlo de menos, pero cuando algo tan pleno se vive, se llega a comprender
cuan pobre es retornar, por la aparente pérdida que representa. Es por ello que
no podemos seguir tirando o malgastando nuestro tiempo.
Se que nos tildarán de muchas
formas, pero la autentica aventura de la vida es interior, fuera se dan
oportunidades para ir hacia dentro, y hay que estar atentos para despertar a la
vida, a la aceptación, a la apertura, al amor, a la libertad, a la ausencia de
miedos, al respeto y al acrecentamiento de los limites de la consciencia y de
la conciencia. ¡Feliz viaje!
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