Lo mejor de todo es que estamos
vivos, que seguimos respirando, que seguimos ilusionándonos cada cual con algo
distinto, que somos capaces de superar las adversidades, que seguimos
sorprendiéndonos, que amamos a alguien,
que sabemos que a alguien le importamos, que tenemos algunos amigos a los que
queremos y que a su vez nos quieren.
Lo mejor de todo es que podemos
sonreír, es que seguimos admirando las flores que colorean cada primavera, es
que admiramos la fortaleza de los árboles, la grandeza de todo lo que compone
la naturaleza. Lo mejor de todo es que somos capaces de contemplar, de mirar
sin prisas y revitalizarnos con esta actitud, nos deleita cada luna llena, nos
complace cuando los rayos del sol nos abrazan en las horas tempranas de cada
mañana, nos reconforta la brisa del viento cuando nos refresca en las horas más
cálidas del día.
Lo mejor de todo es poder
relacionarnos con los nuestros, sean familiares o amigos, y compartir una grata
charla, también nos enriquece conocer nuevas personas porque aprendemos de
ellos, nos cuentan sus experiencias, aportamos y nos aportan sin que medie
algún tipo de interés.
La vida nos da la oportunidad de
sentirnos vivos, es por ello que tenemos que salir de nuestro cascarón para
relacionarnos, para experimentar, para contemplar, para amar. A veces
necesitaremos recluirnos y vivirnos en la intimidad, a veces necesitaremos
abrirnos más. De cualquier manera estemos siempre dispuestos a salir a la vida,
porque es lo que somos y no podemos negarla mientras nuestros corazones latan.
Lo mejor de todo es saber que la
excelencia está por llegar, siempre tendremos pendiente alcanzar el estado de
armonía total con todo, el nirvana, la realización, el estado místico, que cada
cual le llame como quiera, pero que sepamos que es una cuenta pendiente de todo
aquel que viva atento. Por ello, no podemos tirar la toalla, hay que seguir
viviendo todas aquellas situaciones que nos llegan a nuestra existencia, hay
que sortearlas como mejor se pueda, no hay que quedarse atadas a ninguna de ellas
por mucho que nos hayamos afectado. Lo mejor de todo es seguir caminando a
pesar de los aparentes inconvenientes, sigue y pon tu atención en el siguiente
paso, siempre hay luz después de la aparente niebla.
Lo mejor de todo es que cada
situación nos aporta una enseñanza, sigue, no pares, no te enredes en cosas
pequeñas, camina sin miedo, escucha tu corazón, actúa, ama tu entorno estando
atento/a, pero haz lo que creas que tienes que hacer. La vida es como un rio
con sus aguas en continuo movimiento, y al ser vida, somos el mismo rio, cómo
queremos no mojarnos.
Lo
mejor de todo es que somos seres únicos, genuinos, originales, nadie es al 100%
igual a otro, por tanto cada cual tiene su camino, a nadie le sirve al 100% el
camino del otro, y todos somos iguales de importantes para el objetivo de la
vida. Es por ello, que no debemos sentirnos ni inferiores, ni peores que otros
seres cercanos, somos diferentes. Aceptemos esta diversidad y no dejemos de
mirar la vida de frente, ¡Tu si que vales!
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